¿Hacia un retorno digno?

A mediados de diciembre de 2015 acompañamos a la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz, (Cijp), al caserío indígena wounaan Unión Agua Clara, ubicado en las orillas del río San Juan,  en el departamento de Valle del Cauca.

DSC_0060_web
Viajando por el río San Juan: Edwin Mosquera (Cijp), Carlos Quintero (segundo gobernador del resguardo indígena nonam Santa Rosa de Guayacán) y María Luisa Bonanno (PBI)

En noviembre de 2014 se vieron obligados a desplazarse hacia el puerto de Buenaventura por causas relacionadas con el conflicto armado: la presencia de grupos al margen de la ley, los operativos militares o el vivir en un corredor estratégico para el tráfico de sustancias ilícitas fueron algunos de los motivos.

DSC_0070_web

Cijp estuvo acompañando a esta comunidad mientras se encontraba desplazada en el coliseo de Buenaventura, en el cual las familias durmieron en el piso durante meses; un espacio totalmente ajeno a su medio de vida, sin río para pescar y jugar, sin tierra para cultivar, sin montaña para cazar.

Hace dos semanas toda la comunidad, (unas 645 personas), retornó a sus tierras y las declararon Territorio Humanitario y Biodiverso, con la esperanza de poder permanecer allí en paz.

Después de haber acompañado a la comunidad en el coliseo; nos hizo ilusión verlos disfrutar del río que tanto les había hecho falta.

DSC_0100_web
La comunidad se reúne con Edwin Mosquera para hablar de las condiciones actuales del recién retorno.

Tristemente, el escenario parece estar repitiéndose; parte de la comunidad volvió a desplazarse a Buenaventura. Según la comunidad wounaan y Cijp, hay nuevas amenazas de neoparamilitares, además de la falta de condiciones y garantías para un retorno digno y seguro.

Delphine

Deja un comentario